martes, junio 27, 2006

Regresaste y todo estuvo bien.

Palido, muy palido y tieso estaba tu cuerpo desnudo tendido sobre una cama y ella me pedia que la ayudara a acomodarte.

Luego la contencion se hizo necesaria.

Tu comenzaste a despertar, y aún con los ojos cerrados a balcucear algunas palabras. Ella ya se habia retirado del cuarto y yo la llame para que me ayudara a escucharte.

A diferencia de la ultima ves (la ultima) ahora estabas despertando y abriste tus claros ojos y nos dijiste que no te sentias bien. ¿Como te ibas a sentir bien , si estabas muerto!?

Pero anoche en mi sueño fue diferente, con tu mirada me dijiste que volvias, volvias a ordenar todo por que viste que yo sola no podia.

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